La tarea estratégica y adicional ha movido a las grandes empresas a externalizar aquellas actividades iniciales que cuentan hoy con un menor valor añadido, lo que permite a los RRHH centrarse plenamente en el gran objetivo del talento.

La tendencia es que internamente se desempeñen únicamente 2 de los 4 roles correspondientes a este departamento: el de diseño e implantación de políticas competitivas que favorezcan el talento, y el de personas directamente ligadas al negocio que se encarguen de implantarlas, comenta Alfonso Jiménez, Socio Director de PeopleMatters.

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Medio publicado: Expansión - Enero 2019